A mis alumnos…
Estimados miembros del equipo directivo, compañeros profesores, padres y madres, familias… desde la distancia, y, sobre todo, queridísimos alumnos y alumnas que hoy, en un día tan especial para vosotros, aunque extraño, por todos estos momentos complicados que nos ha tocado vivir, celebramos vuestra graduación .
Es cierto que nos hubiera gustado hacerlo de otra manera, acompañados de nuestras familias y algún que otro amigo cercano…
No ha podido ser.
No habéis podido disfrutar momentos tan especiales para vosotros como vuestro deseado viaje a Italia, los entrañables viajes a la nieve, las convivencias de 1º Y 2º de BAT…
Lo sabemos…
Pero si de algo nos ha servido esta experiencia horrible ha sido para darnos cuenta, una vez más, de lo responsables, maduros y fuertes que habéis sido y sois. Sois más fuertes de lo que parece, más valientes de lo que creéis y más inteligentes de lo que pensáis. ¡Sois increíbles!
Y si no que se lo digan a nuestro querido compañero Pablo, Pablo Sampere, que además de a todas estas dificultades, se le ha sumado una más. Y ha sido un ejemplo de entereza y positividad para todos nosotros. Me alegro muchísimo, Pablo, de que estés aquí hoy con tus compañeros de promoción y te esperamos pronto en el colegio, de nuevo, totalmente recuperado. Cuenta con el apoyo de todos tus compañeros y profesores.
Este curso ha sido toda una prueba de desarrollo personal. Como dice nuestro lema de este año, una prueba de reconstrucción interior, de entrega. Esta experiencia nos ha permitido descubrir la entereza, resignación y dignidad con la que habéis afrontado los hechos y esto hace que la promoción 2020-21 sea doblemente reconocida y recordada.
Ya el curso pasado nos tocó seguir las clases online desde casa, responsablemente, con la incertidumbre de qué iba a ocurrir; y este curso, nuevamente lo hemos superado, de forma presencial, con las medidas de seguridad impuestas, tan exigentes, los cambios de horario, mascarillas, litros de gel y metros de papel en las aulas… Lo habéis hecho GENIAL.
Ya decía Albert Einstein: “Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad y la energía atómica: la voluntad.”
Si quiero, puedo.
Esto me dice que estáis preparados para la etapa nueva que empezáis.
Este año no es para mí un curso cualquiera, entre vosotros se encuentra mi hija, Teresa, Teté, y esto hace que mis sentimientos y emociones se dividan entre madre y profesora.
Sois una promoción muy especial para mí. Como madre, a muchos, os he visto crecer, hemos compartido cumpleaños, comuniones, confirmaciones, trayectos en coche por toda la Vega Baja: “mamá – papá, hoy me llevas tú y nos recogen los padres de …”
Hemos disfrutado de fiestas varias… Hemos compartido momentos de risas, momentos tristes y momentos muy tristes, también. Dejémoslo ahí…
Es una alegría como MADRE y como PROFESORA poder despediros hoy después de todos estos momentos vividos, fuera y dentro del colegio. De hecho, se me va a hacer raro el curso próximo no veros por aquí, en las aulas, pasillos, claustros, gradas, en los baños que tanto os gusta visitar a cada hora … ¿Qué tendrán?
Aunque alguno esté deseando dejar el colegio, colgar el uniforme para siempre, no tener que cubrirse los pendientes con tiritas o soltarse la melena … en el fondo, lo vais a echar de menos….
¡Y os lo digo como experiencia propia! Yo fui alumna del colegio. Estuve fuera los cursos que duró mi carrera y, afortunadamente, pude volver como profesora y aquí llevo la friolera de 34 años. Bien sabéis que les he dado clase a algunos padres, madres, tíos de algunos de los alumnos que hoy os graduáis, y os puedo decir llena de orgullo que este es, ha sido y será mi colegio. Se le llega a querer … y mucho.
Acabáis una etapa preciosa que empezasteis un día tal de septiembre, muchos con tan solo tres añitos. Unos llorando cuando se iba mamá o papá; otros sorprendidos del colegio enorme que veíais por primera vez, con unas mochilas más grandes que vosotros mismos; otros ilusionados con las motos, coches, muñecas que os aguardaban en las aulas de infantil y con el cariño incondicional de vuestras seños Manoli, Elvira, Claudia …
Aquí habéis pasado de ser niños pequeños a grandes mujeres y hombres, lo de grandes no va solo por Tymchenko, que también, va por todos y todos formáis una gran familia de BEST FRIENDS que diríais en inglés
¡Enhorabuena! habéis forjado amistades fuertes que vais a mantener siempre, seguro. También durante estos años, habéis puesto todo vuestro empeño, sacrificio, tiempo, muchas horas de estudio y al final… lo habéis logrado.
Es por eso que estoy, estamos satisfechos de vuestro logro académico y, sobre todo, personal. Hemos apostado siempre por vuestra formación como personas íntegras, formadas en valores que apreciaréis, si cabe aún más, cuando marchéis y los mostréis allá donde cada uno esté. El respeto, la amistad, la solidaridad, la humildad … que os acompañen siempre.
Esperamos haber sido capaces de aportaros las herramientas adecuadas para dirigir el timón de vuestras vidas, a pesar de las dificultades que podáis encontrar, como bien decía el lema de hace unos años, curso 2015-2016 para ser exactos , y cuya coprotagonista de cartel, junto a su hermano, si recordáis, está hoy aquí sentada ,a punto de poner en marcha su barca, ¿Te acuerdas Teté?
Hemos llegado al final de esta etapa, a partir de ahora os quedan por vivir otras que serán mucho más intensas, iréis acompañados de otras personas y de otros intereses. Para nosotros ha sido un placer acompañaros en esta de la que ahora nos despedimos. Nosotros nos quedamos aquí, pero nos alegra saber que muy cerca estáis desembarcando con vuestro equipaje de ilusión, entusiasmo, curiosidad y ganas de aprender.
Esperamos, al menos, haberos transmitido la emoción por encontrar la solución a un problema después de haberlo trabajado, o la de aprender a recitar una poesía o la de colarse en la magia de un libro, o la posibilidad de expresaros en otras lenguas. Este pequeño mundo, nuestro del colegio, ha sido como un ensayo del mundo que ahora os espera.
Desde este momento, sabéis que estamos a vuestra disposición, cerca, muy cerca, a solo unos pasos que se irán alejando en la distancia, pero no en el corazón, donde quedarán los mejores recuerdos y las mejores anécdotas. No conozco mejor sitio para guardar todos estos tesoros que este: el corazón.
Y para terminar, me gustaría que escucharais un trocito del precioso poema de Gabriel Celaya que dice:
“Educar es lo mismo
Que poner un motor a una barca…
Hay que medir, pensar, equilibrar…
…y poner todo en marcha.
Pero para eso,
Uno tiene que llevar en el alma
Un poco de marino…
Un poco de pirata…
Un poco de poeta…
Y un kilo y medio de paciencia concentrada.
Pero es consolador soñar
Mientras uno trabaja,
Que ese barco, ese niño
Irá muy lejos por el agua.
Soñar que ese navío
Llevará nuestra carga de palabras
Hacia puertos distantes, hacia islas lejanas”.
Así que, Seguro que llegarán a buen puerto.
¡Muchísima suerte en esta etapa nueva que emprendéis! y, sobre todo, en vuestro PROYECTO PERSONAL DE VIDA.
Que Dios os bendiga.
Dña. Inmaculada López Gálvez, Profesora y madre de esta promoción.
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